Tegucigalpa. El Poder Ejecutivo tomó la decisión del nuevo ajuste salarial en Honduras para el año 2021 de acuerdo a la decisión de las mayorías, anunció este martes el presidente Juan Orlando Hernández junto a representantes del sector obreros y empresarios.

El ajuste del salario mínimo oscilará entre 4,01 % y 8,0% y entrará en vigencia el 1 de julio, según el documento firmado este martes por el mandatario y los representantes de la mesa de negociación tripartita en el Salón Morazán del Palacio José Cecilio del Valle, sede del Poder Ejecutivo de Honduras.

“Quiero felicitarlos porque se ha llegado a puntos coincidentes en cuanto a los porcentajes para cada escala, 4,01%, 5,0% y 8,0 %, y de igual manera darle un trato especial a la industria turística que ha sufrido tanto, pero que también se merece un incremento importante, de igual manera el rubro de la agricultura”, indicó el mandatario.

Precisó que en la parte que no se encontró concordancia fue en la vigencia del ajuste, pues el sector obrero pedía retroactividad desde enero y los empresarios se negaban.

Para el gobernante, si esta decisión se seguía postergando, quizá se iba llegar a octubre.

“Por tanto, tratando de interpretar cuál es el punto medio, esa medida salomónica, hemos decido acompañar este esfuerzo y emitir un acuerdo para que a partir de hoy tengamos certidumbre de cuáles son los valores del aumento y también que las empresas puedan hacer sus previsiones”, explicó.

Dijo que el nuevo ajuste vendrá a revitalizar la economía, generará más consumo y permitirá que los trabajadores resuelvan parte de sus problemas y eso también ayudará a las empresas.

En detalle, las empresas con 1 a 10 empleados darán un incremento del 4,01%; las empresas con un número de trabajadores de entre 11 y 50 será de 4,01%; de 51 a 150 trabajadores la tasa de aumento será de 5,0% y aquellas con más de 151 trabajadores de 8,0 %, según la información proporcionada por el ministro de Trabajo, Olvin Villalobos.

El ajuste entrará en vigencia a partir del 1 de julio próximo.

Además, en la tabla se establece que el sector turismo y el agrario deberán pagar el 4,01 % de aumento salarial.

El porcentaje de incremento para las grandes empresas es el más alto alcanzado en los últimos años, destacó el gobernante, en solidaridad con los más golpeados por la pandemia y las tormentas tropicales Eta y Iota.

“No olvidemos el contexto. Honduras, al igual que los demás países del mundo sufrimos el impacto de la pandemia y además el efecto de dos huracanes. Pasó el tiempo y no llegaban a un acuerdo y los que pierden son los trabajadores y la economía”, puntualizó Hernández.

Obreros y empresarios satisfechos

El dirigente del sector obrero Josué Orellana manifestó que “quizá los tiempos no son lo que nosotros esperamos en primera instancia, pero creo que es importante darle certeza a los trabajadores que esperaban una respuesta de parte de nosotros como comisión negociadora de las centrales obreras”.

Dijo que comprenden “la situación atípica que nos ha tocado negociar en esta ocasión y creo que es entendible”, y que espera que la situación mejore porque no quieren más trabajadores suspendidos ni despedidos.

La representación obrera espera que, en diciembre, cuando se negocie el nuevo salario mínimo para 2022, las condiciones sean mejores para negociar sobre esa medida.

Por su parte, el presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan Carlos Sikaffy, dijo que “la decisión es justa del Gobierno de dar el incremento a partir del 1 de julio; si hubiere sido a partir del 1 de enero, hubiera quebrado muchísimas empresas”.

“Nosotros hubiésemos deseado no tener un incremento para conservar y poder recuperar empleos, pero no puedo negar que el sector trabajador necesita un ajuste”, reconoció.

Insistió en que “yo creo que fue una decisión justa la que tomó el Gobierno de la República decretándolo a partir del 1 de julio y lo felicito”.

Además, añadió, “dentro de cinco o seis meses que nos volvamos a reunir para la decisión de salario mínimo ya va a haber una fórmula que queda dentro del mismo decreto ejecutivo que firmó el presidente de la República donde le manda al ministro de trabajo y al Consejo Económico Social para que en el término de 60 días saquen una ley con una fórmula para fijar el salario mínimo de acuerdo a índices científicos”.