Tegucigalpa. El Informe de Estrategia Internacional para Control de Narcóticos (INCSR, por sus siglas en inglés) del Departamento de Estado reconoce la voluntad política del Gobierno del presidente Juan Orlando Hernández en la lucha contra el narcotráfico en coordinación con los Estados Unidos.

En su primer informe durante la administración del presidente Joe Biden, el NCSR resalta los esfuerzos de Honduras para combatir el narcotráfico y el trabajo conjunto y estrecho que realiza con las autoridades estadounidenses para interrumpir la importación y el desvío de precursores químicos a través de Honduras. 

“El Gobierno de Honduras, como política oficial del Gobierno, no fomenta ni facilita la producción o distribución de drogas ilícitas, ni participa en el blanqueo del producto de la venta de drogas ilícitas”, cita el documento.

A la vez destaca que continúa la voluntad política del Gobierno hondureño de combatir el narcotráfico en coordinación con las fuerzas del orden de los Estados Unidos.

El reconocimiento al trabajo de la Administración Hernández Alvarado en contra del narcotráfico ha sido permanente durante los últimos tres gobiernos estadounidenses, encabezados por Barack Obama, Donald Trump y actualmente Joe Biden.

Incautaciones

En el informe se detalla que entre enero y agosto las autoridades hondureñas incautaron en Puerto Cortés 642.680 kilogramos (kg) de óxido de calcio y 20.716 kilogramos de carbonato de potasio presuntamente desviados para producción ilícita.

Asimismo, destaca que durante los primeros nueve meses de 2020 las incautaciones de cocaína superaron las de 2019, producto del trabajo permanente que las autoridades hondureñas realizan en contra de este delito.

El INCSR detalla que el cultivo de coca a pequeña escala ha estado presente en Honduras durante al menos la última década; sin embargo, resalta que las autoridades hondureñas son cada vez más activas en la erradicación.

El informe del Departamento de Estado indica que entre las medidas implementadas por las autoridades hondureñas para combatir el tráfico de drogas se puede mencionar la aplicación de la justicia a la Policía, el Ejército y otros funcionarios gubernamentales involucrados en el tráfico de drogas y delitos relacionados. 

Estados Unidos se compromete con las autoridades hondureñas para negar a los narcotraficantes el uso del territorio hondureño, aumentar las incautaciones, facilitar las extradiciones de los traficantes, apoyar los enjuiciamientos en Honduras y construir una presencia de seguridad más sólida en las áreas afectadas.

Estrecha colaboración

Asimismo, menciona que, para combatir el lavado de activos, en el último trimestre de 2019, Honduras, bajo el liderazgo de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) y con el apoyo de donantes, estableció una estrategia nacional sobre lavado de dinero y combate a armas de destrucción masiva para implementar leyes y regulaciones relacionadas.

La Ley de Soberanía Aérea de Honduras es un posible primer paso hacia el fortalecimiento de la cooperación entre los Estados Unidos y Honduras en la lucha contra el tráfico aéreo de drogas.

De la misma manera, la Tasa de Seguridad, instituida en 2014 para compensar los desafíos de financiamiento, ha ayudado a las agencias de seguridad; sin embargo, se requieren más fondos para poder seguir luchando contra estos grupos.

Los Estados Unidos brinda asistencia a Honduras a través de la Iniciativa de Seguridad Regional de Centroamérica.

De la misma manera tiene una estrecha colaboración con el Gobierno de Honduras para crear un Centro Combinado para Operaciones Interagenciales (CCOI) para coordinar las operaciones de interdicción y el intercambio de información entre el Ejército, la Policía, los investigadores y los fiscales hondureños.

Además, los Estados Unidos apoyará al CCOI para equipar la instalación y desarrollar las políticas necesarias y los procedimientos operativos estándar.