Fortalecerán capacidades productivas en La Mosquitia
El proyecto Yamni Iwanka, que beneficiará a más de 1,800 misquitos, es ejecutado por la Fundación Ayuda en Acción con financiamiento del Fondo Japonés y el Banco Mundial
Tegucigalpa. Cuatro comunidades misquitas de Gracias a Dios serán beneficiadas con el proyecto “Yamni Iwanka”, que en español significa El Buen Vivir.
Este tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida de la etnia, fortaleciendo sus iniciativas productivas como la producción agrícola y la crianza de aves de corral.
El programa es liderado por la Fundación Ayuda en Acción y será ejecutado en un período de tres años con financiamiento del Gobierno de Japón a través de su programa JSDF (https://www.worldbank.org/en/programs/japan-social-development-fund) administrado por el Banco Mundial.
“Yamni Iwanka” es financiado por una donación de 2,72 millones de dólares del JSDF y tiene el propósito de contribuir al desarrollo, diversificación y fortalecimiento de la producción sostenible de alimentos y medios de vida de 1,800 pobladores de la Mosquitia distribuidos en las comunidades Katainasta, Auhya Yari, Bamiasta y Finzmos.
Con el proyecto se capacitará e implementarán nuevos métodos de cultivo de la producción agrícola, se apoyará la crianza de aves de corral y se financiará la compra de herramientas y equipos para prácticas pesqueras, agroforestería y otras actividades de producción sostenible.
Además, se invertirá en el fortalecimiento de la planificación y gestión de las organizaciones beneficiarias para contribuir a su capacidad de auto-gestión de largo plazo.
Empoderamiento de la mujer
Uno de los pilares es el apoyo en el fortalecimiento de capacidades comunitarias en la gobernanza, empoderamiento de la mujer y el impulso de sinergias con otros proyectos y cooperación disponibles en La Mosquitia.
Se proveerá fondos, por medio de procesos transparentes y competitivos en coordinación con las autoridades territoriales, a organizaciones de productores indígenas de los territorios de intervención.
Se requerirá una contrapartida de al menos un 20% por parte de la organización beneficiaria, que se puede dar en especie con materiales o mano de obra y se buscará que cada subproyecto involucre una alta participación comunitaria, garantizando la inclusión de mujeres y poblaciones marginadas o vulnerables.
“Como un primer paso en el involucramiento activo de la comunidad se conformó un comité consultivo que serán los veedores de proyecto, este estará integrado por la Asociación de Mujeres Indígenas Misquitas MIMAT, Confederación de los Pueblos Autóctonos de Honduras CONPAH, Mancomunidad de Municipios de la Mosquitia MAMUMH, Consejos Territoriales de KATAINASTA, AUHYA YARI, FINZMOS, BAMIASTA y la Universidad Nacional de Agricultura y Ganadería”, señaló Uzías Caleb, Coordinador del proyecto Yamni Iwanka.
Los pueblos indígenas de La Mosquitia han tenido limitado acceso a programas de desarrollo social y económico por lo que esto ha profundizado el deterioro en sus condiciones de vida, a ello, se suma el poco acceso a innovaciones tecnológicas y a financiamiento a mercados y compradores lo que genera pérdidas de ingreso.
Con el proyecto se espera facilitarles las herramientas de conocimiento y financiamiento para incrementar sus niveles de producción y hacer frente a su demanda de alimentos, mejorar sus ingresos y obtener seguridad que les permita mejorar su vida.
Solidaridad
“Este proyecto nos vendrá a ayudar al desarrollo de las comunidades que durante años ha vivido en vulnerabilidad, nos alegra que el 50% de los beneficiaros serán mujeres y esto nos da una oportunidad de crecimiento”, expresó Loly Gream, Representante de la Asociación de Mujeres Indígenas Misquitas MIMAT
“El proyecto Yamni Iwanka coloca a la población indígena misquita como participantes activos de su propio bienestar donde el empoderamiento surja y haga más fuerte sus iniciativas de vida”, manifestó Roberto Bussi, Director de Ayuda en Acción en Honduras.
“Este proyecto y el fondo japones, permite invertir directamente en los pueblos indígenas como los principales conocedores de sus realidades y dueños de su futuro. Lo hará con la prudencia de coordinar con sus autoridades como socios y brindar el acompañamiento necesario desde la concepción hasta el cierre de cada subproyecto, dejando instalado una capacidad organizativa fortalecida en cada organización participante” dijo Dianna Pizarro, gerente del Proyecto de parte del Banco Mundial.
De interés
▪︎El JSDF fue creado en junio de 2000 por Japón y el Banco Mundial como un mecanismo para proveer asistencia directa a los grupos más pobres y vulnerables. Japón ha aportado más de 750 millones de dólares.
▪︎ El Banco Mundial es el administrador del programa, supervisa su implementación y asegura la transparencia y eficiencia en el uso de sus fondos de acuerdo con sus normas para las adquisiciones, manejo financiero y gestión ambiental y social.